¡Nos vamos!

¿Por qué me gusta tanto Newcastle? El año pasado cuando mis padres me vinieron a ver, maravillados por la inmensa catedral normanda de Durham me insistieron para que no me mudara a Newcastle, la ciudad fea a solo unos pocos kilómetros. ¿Tendría sentido decir que Durham es como Jaca y Newcastle como Sabiñánigo? Algo así. Durham es la ciudad medieval, con su catedral como epicentro de toda actividad y una gran leyenda en el corazón de su historia. Newcastle es la ciudad industrial que ahora declina.
Y sin embargo Newcastle es un lugar mucho más acogedor. Quizá porque cuando uno se va a dar un paseo por aquí inmediatamente se siente que aquí hay sitio para todos. Para pobres y para ricos, todos se encuentran en las calles comerciales.
Durante el fin de semana la ciudad se vuelve un caos… la gente se deja la ropa en casa, y medio desnuda sale a emborracharse como si el mundo se acabase mañana. No sólo los más jóvenes. Aquí en Newcastle salen juntos gente de varias generaciones. El domingo la ciudad tiene una resaca inmensa, las calles oscurecidas por las bebidas, un olor pegajoso saliendo del asfalto… a mí no sé si es porque me recuerda a Bailo después de fiestas es un momento de la semana que me encanta.
Muchos domingos Bas y yo nos unimos a la costumbre local y nos vamos a comer una buena “freída” (fry-up) que es el desayuno de salchichas-panceta-champis-huevos revueltos-tomate-tostada-te o nos vamos a tomar un fish-and-chips, pescado frito con patatas fritas, que también se toma con té (la primera vez que Ja y Che me vinieron a ver yo ni sabía lo que era y ahora soy una experta).
Lo de la marcha en esta ciudad a veces le saca a uno de quicio, particularmente en mí caso que vivo justo encima de todo el meollo, pero por otro lado da gusto ver una ciudad que nunca se cansa, que siempre está de marcha, con una energía increíble.
Bueno, esto es sólo un pequeño homenaje, que escribo desde el piso donde he pasado un año de mi vida. Es extraño, porque aunque me parece que hay algo muy importante que me dejo también tengo prisa por irme. Pero simplemente para que os hagáis una idea de lo felices que hemos sido aquí con Bas, aquí pongo una foto que lo demuestra.

1 comments:

Jareta dijo...

Sin duda teneís una cara de felicidad increible... No habriais estado repasado los locales de vuestra calle, ¿verdad? Jejeje. A mi me encanta que os vayaís a Londres, que está más cerica.... Besos! Ah! SI te los voy a dar mañana o pasado en persona! Que bien! Eso si la nieve de UK os permite volar.... Muuuac