Gramáticas y gramatistas

Esta semana Rubiales en su blog El Océano nos plantea una interesante questión, al hilo de los pensamientos de Gabriel García Márquez. El dilemma en cuestión es la necesidad de una gramática en el mundo de hoy.
Da la casualidad que dedico una gran parte del día en pensar en cosas como ésta, aparentemente irrelevantes, y sin embargo, cosas que están en el corazón de nuestro ejercicio diario de la personalidad.
En primer lugar el lenguage no es una cosa que 'es' sino, mal copiando a Deleuze, el lenguage es algo que 'deviene'. Esto es, el lenguage es creado y recreado en multitud de interacciones diarias, las cuales estan simultáneamente dentro y fuera de nuestro control. Lo que quiere decir, que en vano se ponen trabas y reglas a un lenguage en constante evolución.
Por otro lado, la existencia de la gramática no es superflua, ni mucho menos. Comprendiendo la gramática comprendemos el intringulis de las relaciones humanas. Por un lado parecen sujetas a millones de reglas talladas en nuestro subconsciente (eg yo pregunto tu respondes, etc etc etc). Por otro lado la excepción y la sorpresa es lo que hace la interaccion realmente interesante. Como una gramática, sostenida en unas cuantas reglas pero presas de las excepciones y la gramática.
Mi argumento: la gramática es innecesaria como cerrajera del lenguage y sin embargo es extremadamente necesaria para la integración del lenguage en los aspectos más cotidianos de nuestra vida. Si bien la gramática no dictamina necesariamente lo que se dice o no (de hecho el lenguage coloquial es más bien agramático, y por eso, tan difícil de representar en las novelas y libros) la gramática es esencial para obtener una imagen coherente del lenguage como un aceptable medio de comunicación. Y si no, pensemos en el lenguage gestual: no hay gramática alguna de los gestos y por tanto nos parecen carentes de significado dentro de un sistema coherente de comunicación y sin embargo son la base de la comunicación diaria. Sin gestos no hay comunicación y sin embargo es difícil explicarlos sin recurrir al subconsciente o al instinto o como mucho al hábito.
No olvidemos que el lenguage es ante todo un instrumento de racionalización (quizá también de opresión) y como tal necesita tener una base racionalizada para crear la ilusión de que nos permite una comprensión racional del mundo. Podemos decir que en realidad, por culpa del lenguage, la parte que comprendemos del mundo es muy pequeña. Pero hasta que alguien no demuestre lo contrario, el lenguage nos da la receta de la única sociedad viable.
Sí a la gramática (pero en el fondo mantengo la esperanza de que un abandono total de la gramática revolucione el mundo y nos volvemos nuevos)
Y otra cosa, ¿ por qué la ortografía es un sufrimiento y no un maravilloso divertimento?
Me parece un tema interesantísimo, pero no vale escudarse detrás d euno de los grandes, Rubiales, ¿qué es lo que tu piensas?
Muchos besos

2 comments:

Rubiales dijo...

Acabo de responder a esto en mi blog, ¿quieres que lo transcriba aquí?

Los sistemas gramaticales son más o menos diversos (complejos) en el panorama lingüístico mundial. Mi posición a este respecto es que sí, defendería una simplificación racional de la gramática para hacerla más clara, más sencilla. Pero ojo, eso no tiene porqué redundar en la precisión del lenguaje.

Sobre la ortografía. Pues mira, para unos será divertido, para otros un suplicio. En ambos casos se invierte un considerable esfuerzo (y tiempo) en aprenderla. ¿Merece la pena obligar a todos los que quieran comunicarse en mi idioma a pasar por ello? Sin éxito asegurado, además... Yo creo que no...

Rubiales dijo...

Eres un sol, gracias por tu ayuda en la gramática y ortografía... inglesas...
Más besos...