La anécdota…

Entre todas mis anécdotas he elegido contaros, como no, la que pasé con más ridículo.
Fue una de las tardes del festival, que era en un parque al aire libre, todo gratis… había quedado con dos amigos: Joice, una administrativa en una compañía aérea y Jim, un ingeniero electrónico. Primero llegó Joice y por primera vez desde que estaba en Chicago me dí cuenta que era una engreída. No se quería sentar donde yo estaba porque cerca de mí había un tipo que "parecía pobre". Ni olía ni nada, chica y encima era simpatiquísimo, pero Joice se enfurruñó un poco. Ahora yo no doy mi brazo a torcer por tonterías así que me negué a moverme del sitio y a Joice no le quedó más remedio que quedarse donde estaba. ¿Por qué Joice decidió quedarse conmigo? Pues porque Joice quería ver a Jim y Jim quería verme a mí, y yo solo quería un grupillo de gente para ir a los conciertos.
Cuando Jim llegó, Joice que lo tenía todo preparado le hizo sentarse a su lado, de modo que estábamos yo, luego Joice y luego Jim. Como Joice estaba muy ocupada explicándole a Jim lo guay que era, yo acabé hablando con la persona que estaba a mi otro lado, Larry. Larry era un tipo muy atractivo, que me dijo que trabajaba en una oficina pero su verdadera vocación era la trompeta, como Miles Davis. Y como Miles Davis me pareció el chico, guapísimo y simpátiquisimo (cuidao que yo soy fiel, pero vamos también se puede apreciar la guapura ajena). Yo le dije que los Chicagoanos me caían genial porque me trataban muy bien. El me dijo que me trataban muy bien porque era muy guapa. Yo me puse roja como un tomate y no dije nada más.
Entre tanto Joice se había ido el baño, momento que Jim, sin yo notarlo, había aprovechado para sentarse a mi lado y escuchar la conversación. Me tocó el brazo (en plan por qué hablas con ése) y yo traté de sonreír y tomar control. Miré hacia el concierto. Estaba en un espacio de medio metro cuadrado, con dos hombres, uno a cada lado que se odiaban sin ni siquiera haber cruzado palabra... por mí: no estoy exagerando, estos fueron los que parecían los minutos más largos de mi vida. Como una pelota de ping pong, a uno y otro lado, ambos dándome conversación, pero simulando no percibir la presencia del otro macho.
Yo, que no estoy por la labor en estos rituales, rompí la tensión yéndome al baño.
Cuando volví Joice estaba otra vez tratando de capturar la atención de Jim y Larry musitó una disculpa y desapareció antes de que pudiera decir ni pío. Aunque antes de irse me volvió a poner roja con un piropo.

6 comments:

Sr. Editor dijo...

jejeje, hay que leer esta entrada con el Pretty Woman de Roy de fondo, ¿no?. Máquina...que los llevas locos....

Vane dijo...

Tu no crees que eso de tener que aguantar a dos pesados en los que no tienes un gran interes no es un reflejo de muchas penalidades que las mujeres tenemos que pasar para reafirmarnos por otra cosa que no sea objeto sexual?

Sr. Editor dijo...

Jajajajajajaaja, no lo creo. Si un tío sufriera esa penalidad estaría encantado de ser un objeto sexual y además se quedaría con las dos, jejejejejeje.

Anónimo dijo...

Ahi esta Che. Lo mismo el cirujano (o cirujana que el lenguage engaña aunque he traducido del ejemplo del ingles donde la segregacion de la mujer es aun peor) porque es la madre del niño. El problema es que no se asocia lo de ser cirujano y ser mujer: esa es la discriminacion invisible de la mujer.

Anónimo dijo...

El problema es que ni siquiera vemos que es un problema; pero lo es.

Sr. Editor dijo...

En total desacuerdo Vaner...no me vale ni siquiera eso de la traducción literal, porque fijate el castellano es tan rico que hasta en eso se diferencia del inglés, aunque sería la única posibilidad para darte la razón, pero no es así, no. Con feminismos de ese tipo, con sensibilidades tan sensibles, jejeje, llegamos a estos equívocos, que si lo son, lo son intencionados. Me explico, rizáis tanto el rizo que os pasáis y queréis autoconvenceros y convencernos de que el idioma es otra herramienta más del machismo. Falso. Además intentáis incluso justificarlo hasta límites absurdos, como este ejemplo, para así tener la razón. Falso.
A ver, el cuento era que el cirujano dice que no puede...,así pues, era el cirujano. En ese caso sólo puede ser su padre un hombre, EL CIRUJANO, él. Si te hubieras expresado correctamente, "la cirujano o la cirujana", no hubiera existido duda alguna o equívoco en ningún momento. Es un ejemplo más de la tontería progre de la igualdad, querríais que todo el mundo dijera o dijese la jueza y no la juez, la médica y no la médico...y por qué no decís también el policío, el tenisto, el periodisto. Pues porque es una gilipollez como un piano y para eso el castellano tiene sus reglas. ¿De origen machista por aquello del plural mayestático y general y tal y tal...?, oíga no me venga con chorradas y aprenda bien su lengua, a pesar de la LOGSE, jejeje.
La juez, el policía, el cirujano, la cirujana e incluso sería correcto la cirujano.No sé donde hay equívoco a no ser de una torticera interpretación del lenguaje, así, claro, podremos decir que "el problema es que no se asocia lo de ser cirujano y ser mujer: esa es la discriminación invisible de la mujer".
Venga ya tía...en un comentario ya lo deje caer pero tener que dar explicaciones ya es lo último.
En Arabia Saudí igual sí es un problema pero que me quieras vender la moto de que en Occidente no se asocia a la mujer con puestos de alta responsabilidad, preparación y remuneración, pues coleguita, por ahí no paso...jovenes y jovenas que decía aquella...venga ya...