Una comunidad pequeña
Bueno, uno se pone así a desmontar ausencias, y se encuentra contando las mayores tonterías... Hay tantos detalles, tantas cosas que me pasan cada día y no puedo contar a nadie...
Esta es una comunidad pequeña. ¿Significado? Hay que tener un cuidado enorme con las palabras. Cada palabra es un aguijón envenenado que puede determinar que dejes de hablarte con la mitad de la comunidad. Hay quien dice que una comunidad pequeña responde muy bien en situaciones límite, y cuando alguien tiene el mínimo problema todos le apoyan en todo lo posible... pero el día a día... esa es otra cuestión.
¿Alguien ha leído la Barraca, de Blasco Ibáñez? Hay veces que me acuerdo de ese libro: una comunidad cerrada donde parece que todos piensan al unísono... grandes diferencias económicas, una burbuja que puede estallar en cualquier momento. Tengo que matizar que al menos esta es una versión pacifica de esa situación.
Pero el lugar es muy hermoso. Una amiga mía dice que este es el lugar ideal para cultivar el amor: paseos en el lago al atardecer, tardes largas tomando el sol, encontronazos jugando al golf... Yo no estoy de acuerdo. Wageningen me parecía mucho más romántico. Mas que nada porque no había montañas de basura apiladas al otro lado del campo de golf.
Hoy iré por primera vez a la ciudad, desde que estoy aquí. Estoy emocionada, ¡volver de nuevo al mundo real! Espero que no me impacte tanto como el día que llegué desde Lagos. Os lo cuento en cuanto vuelva.
Un abrazo
Vane
1 comments:
Yo creo que jugar al golf no es romántico
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